Entre tareas, plazos, atascos,
preocupaciones que hipotecan la alegría
y relojes hiperactivos que no saben parar
pido,demando y exigo
a grito partido
mi derecho a tener tiempo
para contar.
Para contar
todas las olas del mar
las estrellas del cielo
las constelaciones de tu cuerpo
las veces que sonreí sin más
o aquellas que tuve que llorar
ya de pena o felicidad.
Para contar hasta mil o hasta la mitad
para contar contigo
y con todo el mundo
que en mi vida está,
para que sepas
que puedes tú contar conmigo
donde quiera que vas.
Para contar cien cuentos
llenos de magia
y hacer que los ojos
brillen de estrellas o vuelen en paz.
Entre versos traviesos
y letras que vienen y van
me hago un colchón de tiempo
de ese sin tiempo del que hablaba Mario
para reclamar aqui
mi derecho a contar.